¿Tú también estás pensando en estudiar para convertirte en enfermero o enfermera? Si bien es cierto que este puesto de trabajo requiere de sacrificio y esfuerzo, llevarlo a cabo suele suponer una gratificación personal enorme para la persona que lo realiza y, además, suele acarrear numerosos beneficios. Además, es un trabajo para el que siempre se abren vacantes de forma constante, así que es bastante probable que consigas tus objetivos en un periodo de tiempo asequible.

¡Sigue leyendo porque todavía te damos más razones para estudiar enfermería!

10 razones para estudiar enfermería

Primeramente, ten claro que tienes vocación por la enfermería. Si esto es así, ¡estupendo! El trabajo de enfermero/a es para ti. Pero, si no lo tienes del todo claro, seguro que estas 10 razones te ayudan a convencerte.

  1. Trabajarás en lo que más te gusta. Una excelente razón para estudiar enfermería es poder trabajar de aquello que te apasiona o te interesa.
  2. Tu trabajo será reconocido. Aquella época en la que este tupo de profesionales no eran alabados por sus labores ha quedado, por suerte, atrás. Hoy en día, todo el personal de los hospitales y de los centros de salud reconoce el papel que realizan los profesionales de la enfermería, pues es fundamental. Pero, además del personal sanitario, la sociedad también reconoce el valor de los enfermeros y enfermeras, tal y como se ha visto durante la pandemia sufrida por la Covid-19.
  3. Es un trabajo exigente, complicado y duro. Tendrás que ser paciente y empático. Pero tu trabajo consistirá en ayudar a las personas a recuperar su salud y bienestar, algo que lograrás en miles de ocasiones y que te dará una profunda sensación de satisfacción.
  4. Gracias a tu formación y experiencia, podrás aplicar tus conocimientos en multitud de situaciones. Incluso puede darse el caso de que llegues a salvar la vida a alguien que se encuentre en una situación donde su salud y su bienestar corran peligro como, por ejemplo, alguien que acaba de sufrir un accidente.
  5. Trabajarás con y para los demás. Si te gusta trabajar con personas y, además, no te gusta estar quieto, desde luego debes estudiar enfermería. Desde el momento en el que empieces a ejercer, estarás rodeado de gente a la que ayudarás como, por ejemplo, tus compañeros de trabajo y tus pacientes.
  6. Puedes tener un trabajo estable y seguro. Una de las opciones después de estudiar enfermería es opositar. En caso de que las apruebes, lo cual es bastante probable si cuentas con una buena academia en la que apoyarte, pasarás a formar parte de la administración pública y podrás gozar de todos los beneficios que eso implica.
  7. Un auxiliar de enfermería que trabaje en el sector público cobrará entre 12.000 y 17.000 euros al año. Sin embargo, al igual que sucede en el resto de puestos de trabajo de la administración pública, tu sueldo se verá aumentando en función de los turnos que realices, la antigüedad de la que dispongas, el cargo que ocupes y demás.
  8. El paro en este sector es muy bajo. Debido a la alta demanda de profesionales en este sector, es muy probable que siempre estés trabajando.

Nuestra sociedad necesita muchas enfermeras que sepan hacer bien su trabajo. Si quieres ser uno de ellos, enhorabuena, has elegido una de las profesiones más apreciadas y admiradas que existen y muy seguramente no te arrepentirás.

Desde Udeka queremos que consigas tus objetivos y, por eso, ponemos a tu disposición los mejores cursos de enfermería para que puedas formarte como te mereces. Si, por el contrario, ya cuentas con formación en este ámbito y estás pensando en opositar, te ofrecemos las mejores academias de preparación de oposiciones de enfermería, donde encontrarás los temarios más actualizados y donde podrás aprender de la mano de grandes expertos en la materia. ¿A qué esperas? ¡Deja que te ayudemos!